Cuéntame un cuento...

...o una historia, o una anécdota... Simplemente algo que me haga reir, pensar, soñar o todo a la vez, si cabe ..Si quereis mandarme alguna de estas, hacedlo a pues80@hotmail.com..

viernes, octubre 10

Aprendiendo a llamar a la policía

(Recibido por correo electrónico)

"Yo tengo un sueño muy liviano, y en una de esas noches noté que había alguien andando sigilosamente por el jardín de la casa. Me levanté silenciosamente y me quedé siguiendo los leves ruidos que venían de afuera, hasta ver una silueta pasando por la ventana del baño.

Como mi casa es muy segura, con rejas en las ventanas y trancas internas en las puertas, no me preocupé demasiado, pero estaba claro que no iba a dejar al ladrón ahí, contemplándolo tranquilamente. Llamé a la policía e informé la situación y di mi dirección. Me preguntaron si el
ladrón estaba armado; de que calibre era el arma; si estaba solo etc. o si ya estaba dentro de la casa.

Aclaré que no y que de las características del arma no sabía nada. Ellos me respondieron que no había ninguna patrulla cerca para ayudar, pero que mandarían a alguien en cuanto fuera posible. ¡Que si pasaba algo que volviera a llamar!

Un minuto después llamé nuevamente y dije con voz calmada:

- Hola, hace un rato llamé porque había alguien en mi jardín. No hay necesidad de que se apuren. Ya he matado al tipo con un tiro de escopeta calibre 12, que tengo guardada para estas situaciones. Y el tiro se lo he pegado en la cabeza. !Le volé la cabeza con la bala!. Ahora sus sesos
están regados por el jardín...

Pasados menos de tres minutos, había en mi calle 5 patrullas de policía, agentes de los GEO, de la Armada Nacional, un helicóptero de la policía, 1 unidad de Bomberos, el defensores del pueblo, 2 patrullas de la Defensa Civil, 3 de la policía metropolitana, un equipo de reporteros de TC Televisión con Jonathan Carrera al frente, 1 de fotógrafos de la Extra, 1 fiscal del Ministerio Publico, 1 diputado, 2 concejales y un grupo de los derechos humanos con la Hermana Elsie Monge a la cabeza y que no se perderían esto por nada del mundo.

Ellos agarraron al ladrón in fraganti, quien estaba mirando todo con cara de asombro. Tal vez pensara que era la casa del Jefe de Policía.

En medio del tumulto, un Oficial se aproximó y me dijo:

- Creí que había dicho que había matado al ladrón.

Yo le conteste:

- Creí que me habían dicho que no había nadie disponible."

Etiquetas: